La Columna y la Piedad se encontraran el Viernes Santo en el acto de "liberación de presos".

Más de 2.500 cofrades confluirán en la madrugada del Viernes Santo en Zaragoza, que este año estrena su reconocimiento internacional, en un nuevo acto por la libertad organizado por las dos hermandades de la ciudad que han conseguido sendos indultos,una de ellas por primera vez en su historia.

Se trata de un encuentro organizado por las cofradías de Nuestra Señora de la Piedad y Santo Sepulcro y la del Señor Atado a la Columna que comenzará poco antes de la una de la madrugada del Viernes y en el que participará el arzobispo de Zaragoza, Manuel Urueña, quien leerá un manifiesto "por la libertad".

Este encuentro, en el que el arzobispo recordará en su manifiesto a los presos de Zuera y Daroca, se enmarca dentro de las procesiones que organizan sendas cofradías, que confluirán por primera vez en las calles Manifestación y Alfonso I, según ha explicado Armando Cester, Hermano Mayor de la Cofradía del Señor Atado a la Columna.

Este nuevo acto, al que acudirán los dos presos ya indultados pero de incógnito para no ser reconocidos, se produce después de que una de las dos cofradías organizadoras, la del Señor Atado a la Columna, haya conseguido por primera vez un indulto después de un año solicitándolo.

A las 21.30 horas saldrá de la iglesia de Santiago el Mayor la procesión que organizada la Cofradía del Señor Atado a la Columna, integrada por 1.360 hermanos.

Dos horas y media después, a las 00.00, hará lo propio la cofradía de la Piedad, con más de 1.200 hermanos, que saldrá de la iglesia de San Cayetano.

En total serán seis pasos los que confluirán en este acto de "liberación de presos".

El indulto a los presos de Semana Santa es una acción para sensibilizar a la sociedad sobre las personas privadas de libertad, ha dicho Armando Cester, Hermano Mayor de la Cofradía del Señor Atado a la Columna.

Todos los años las cofradías solicitan la medida de gracia para aquellos reos de su provincia que cumplan los requisitos de un indulto ordinario, es decir, que cumplan condena en la actualidad y que concurran razones de justicia, equidad o utilidad pública.

Para Cester, las cofradías están cumpliendo "una misión de justicia de primer orden" al solicitar estos indultos para personas que han cumplido ya su "reinserción" en la cárcel.

Asimismo, ha destacado que el indulto nace del trabajo que realizan en prisión.


Cester ha recordado que las personas a las que se les concede el indulto suelen ser presos que tienen un comportamiento "excelente" y que cumplen con determinadas características, como no haber cometido delitos de sangre y haber cumplido tres cuartas partes de la condena. 



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